miércoles, 17 de junio de 2015

Clase 12: viernes 14/06/2024

Presidencia de JOSÉ FÉLIX URIBURU (1930-1932)

  • Recuperación crisis económica del año 1930 comienza paulatinamente a partir del año 1933
  • Creciente migración interna (trabajadores que provienen del campo atraídos por la demanda de empleo provocada por la aparición de nuevas industrias y carencia de mano de obra debido al corte del flujo de inmigrantes extranjeros).
  • Crecimiento del poder de los sindicatos
    • Transporte
    • Servicios Públicos
    • Obreros industriales
    • Sindicato de la construcción
  • El estado:
    • Recurre a la represión
    • Concede mejoras en algunos grupos obreros
      • Sábado Inglés
      • Indemnización por despido
      • Licencia por enfermedad empleados de comercio

  

Presidencia de AGUSTÍN P. JUSTO (1932-1938)

Estado cómo interlocutor válido para resolver conflictos (mejores salarios y condiciones de trabajo).

  • Sindicalismo:
    • Tendencia sindicalista (postura apartidaria).
    • Socialista y comunista (reclaman mayor participación en la esfera política. Proponen formar un frente popular contra el régimen de Justo).

  • Elecciones Fraudulentas


Presidencia de ROBERTO MARCELINO ORTIZ/ RAMÓN S. CASTILLO (1938-1942).

  • Presidente Ortiz: Radical Antipersonalista
  • Vicepresidente Castillo: Conservador (seguidores de Agustín P. Justo).

1942: renuncia el presidente R. M. Ortiz (enfermedad).


Presidencia de RAMÓN S. CASTILLO (1942-1943).


Neutralidad frente al conflicto de la segunda guerra mundial

Pérdida de mercados europeos

Sigue el comercio con Inglaterra, pero no se reciben las divisas (acuerdo presidencia de Ortiz Castillo) hasta finalizar la guerra.

Reemplazo de importaciones/ exportación de productos manufacturados (Latinoamérica). Debido a la guerra.

Plan de reactivación económica nacional (Pinedo). Sostener solo industrias viables (sin materias primas importadas)

  • Ejercito como actor político
    • Creación Instituto Geográfico Militar
    • Creación de Fabricaciones Militares



República de masas


·        Golpe de estado 

Gral. Arturo Rawson: 4/6/1943 (dura 48 hs en el poder).


EL GOU (Grupo de Oficiales Unidos)

    • Afianzar la organización y la unidad de la sociedad militar interna.
    • Prevenir la insurgencia comunista.
    • Oponerse al ingreso de la República argentina en el conflicto de la Segunda Guerra Mundial por la influencia de la presión estadounidense.
    • Oponerse a la interferencia de la política en la organización profesional del Ejército.
    • Trabajar para el bienestar general de la Patria y el Ejército.
    • Evitar la llegada a la presidencia del político conservador Robustiano Patrón Costas (candidato de Castillo).


Presidencia de PEDRO PABLO RAMÍREZ (1943-1944)

Argentina rompe relaciones con los países del eje.


Presidencia de EDELMIRO J. FARRELL (1944-1946)


Coronel Juan domingo Perón

  • Ministro de Guerra
  • Vicepresidente
  • Secretario de trabajo y previsión (trato personalizado con los dirigentes obreros)
    • Impulsa a las organizaciones obreras a organizarse y a presentar sus demandas (excepto a las comunistas).
    • Supervisa contratos colectivos de trabajo
    • Establece las vacaciones pagas.
    • Régimen de jubilaciones
    • Régimen de accidentes de trabajo
    • Estatuto del Peón

Hitos:
  • 27 de marzo de 1945 Farrel declara la guerra al eje. La segunda guerra mundial finaliza el 8 de mayo de 1945.
  • Creación de la Unión democrática: Radicales, demócratas progresistas, socialistas, comunistas y conservadores.
  • Marcha de la constitución y la libertad.
  • Se pide la renuncia de Perón a todos sus cargos
  • Perón renuncia a sus cargos 10 octubre.
  • Perón es arrestado el 13 de octubre y se lo traslada a la isla Martín García.
  • 16 de octubre, reunión de la CGT (huelga Gral. para el día 18)
  • 17 de octubre de 1945.


 

El 45


La República de Masas (1943-1955):


1ra. Presidencia de JUAN DOMINGO PERÓN (1946-1952).

·         Primer plan Quinquenal (1946-1951)
o   Impulsar industria liviana.
o   Estimular el mercado interno.
o   Nacionalizar las empresas de energía y servicios públicos.

·         Estado Benefactor: redistribución de la riqueza, de las clases sociales más pudientes hacia los sectores desposeídos.
o   Legislación Laboral.
o   Creación Banco Hipotecario.
o   Política de salud.
o   Política Educativa.
·         Movimiento Obrero.

·         Vínculo entre las masas y el líder.
o   Presencia de líder carismático.
o   Utilización de los medios de comunicación.
o   Programa económico: nacionalista e industrialista (crecimiento del mercado interno, pleno empleo).
o   Estado de Bienestar.

·         Política Laboral.
o   Acentuó los elementos emocionales de la adhesión que le prestaba la clase obrera.
o   Estableció una rígida organización sindical a través de la CGT.
o   Mantuvo una política de salarios altos a través de la gestión de contratos colectivos de trabajo. 

·         Reforma constitucional 1949.

·         Figura de Eva Perón.


2da. Presidencia de JUAN DOMINGO PERÓN (1952-1955)

·         Crisis Económica y segundo plan Quinquenal
o   Plan Marshall: caída de las exportaciones.
o   Reducción superficie cultivada.
o   Mayor demanda interna productos agropecuarios.
o   Prolongada sequía.
o   Faltante de divisas.

·         Conflicto con la Iglesia.

·         Golpe de Estado: 16 de septiembre de 1955.





Los años peronistas



Eva y la cultura peronista


 

 El Bombardeo de la Vergüenza



Textos Recomendados:
  • "Cabecita Negra", Germán Rozenmacher.
  • "Casa Tomada", Julio Cortázar.
  • "La fiesta del monstruo", Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares.
  • "Eva Perón", Copi.
  • "El 17 de octubre de 1945", Norberto Galasso.
  • "Con el bombo y la palabra", Rodolfo Edwards.

EJERCITACIÓN:

  1. Luego de la renuncia de Roberto M. Ortiz en el año 1940. Cual fue la política que adoptó Ramón Castillo. 
  2. En relación a la segunda guerra mundial, cual fue el posicionamiento del gobierno y cuál fue el posicionamiento de los sectores que se oponían a éste.
  3. Que era el GOU.
  4. Cual fue la política implementada por Pedro Ramírez luego de asumir el poder a través de un golpe de estado.
  5. Que cargos ocupó Juan D. Perón en el gobierno de P. Ramírez y cuales cargos ocupó en el gobierno de Edelmiro Farrell.
  6. En que se apoyaba Juan D. Perón para desarrollar su política en el gobierno de E. Farrell.
  7. Quienes y porqué motivo se exige la renuncia de Perón.
  8. Desarrolle una pequeña línea de tiempo con los sucesos que desembocaron en la jornada del 17 de octubre de 1945.


Golpe de Estado 16 de septiembre de 1955.



La revolución Libertadora 




El bombardeo de la vergüenzahttps://youtu.be/XIPX77-t95o




28/06/2024: 2do. Examen parcial

La Revolución de Mayo (Norberto Galasso)
La Revolución de Mayo y Mariano Moreno (Norberto Galasso).
La República Liberal 1880-1916 (José Luis Romero).
La República Radical 1916-1930 (José Luis Romero).
La República Conservadora 1930-1943 (José Luis Romero).
La República de Masas 1943-1955 (José Luis Romero).
La semana trágica de enero de 1919 (Julio Godio).









jueves, 11 de junio de 2015

Clase 11: viernes 07/06/2024

La década del ´30:

1930: creación de la CGT. Se termina de constituir hacia 1937.
1936-1939: guerra civil española. Republicanos vs Nacionalistas.
1939-1945: 2da guerra mundial. Aliados vs Eje.


  •   Presidencia de JOSÉ FÉLIX URIBURU (1930-1932).
  •   Presidencia de AGUSTÍN P. JUSTO (1932-1938).
  •   Presidencia de ROBERTO MARCELINO ORTIZ (1938-1942).
  •   Presidencia de RAMÓN S. CASTILLO (1942-1943).

Mensaje de funcionarios del presidente provisional Uriburu y del general Justo


  Fragmento de un filme promocional del autoproclamado gobierno provisorio del general José Félix Uriburu, realizado por Cinematográfica Valle poco después del golpe militar del 6 de septiembre de 1930. Una serie de funcionarios del mencionado gobierno realizan alocuciones de tono crítico hacia el gobierno constitucional depuesto de Hipólito Yrigoyen y, en línea con el nuevo presidente de facto, presentan algunos conceptos. Luego, el general Agustín P. Justo considera que el golpe restableció la normalidad institucional del país y asegura que el Ejército interpretó las aspiraciones del pueblo. Hacia el final, la cinta exhibe imágenes de una concentración masiva en una plaza, superpuestas con un desfile militar.



El Golpe
  • Cadetes del colegio militar
  • Tropas de la escuela de comunicaciones
Luego del gobierno de Uriburu, es elegido Agustín P. Justo.


 CONCORDANCIA
  • Partido Demócrata Nacional (partido conservador).
  • UCR Antipersonalista (anticaudillo, antipopulista).
  • Partido Socialista Independiente.

  • La década Infame: fraude patriótico
  • Voto calificado
  • Grupo de nacionalista (teóricos del corporativismo), revisionismo rosista
  • Intento de reforma constitucional
  • 8 de noviembre 1931 elecciones
Se cierra el país a la inmigración (política conservadora).


Agustín P. Justo – Julio Roca (hijo).

1932 conferencia de Ottawa. Gran Bretaña acuerda dar prioridad de comercio a los integrantes de sus dominios (Commonwealth) por las que se obligaba a comprar carnes sólo a sus colonias y excolonias, las cuales eran Canadá, Australia y Sudáfrica, entre otras.


Pacto Roca-Runciman
  • Régimen de exportación de carnes, compensada con importantes concesiones al capital británico.
  • Impedir la competencia de EEUU
  • Actitud intervencionista del estado
  • Creación del instituto movilizador
  • Control de cambios: regular importaciones y uso de las divisas extranjeras
  • Creación Banco Central
  • Juntas reguladoras: carne, granos, vid, etc


DISCURSO EN EL CENTENARIO DE LA BATALLA DE AYACUCHO «La hora de la espada» Leopoldo Lugones
[9 de Diciembre de 1924]

Señoras, Excelentísimo Señor Presidente de la República, Señores:
Tras el huracán de bronce en que acaban de prorrumpir los clarines de la epopeya, precedidos todavía por la noble trompa de plata con que anticipó la aclamación el más alto espíritu de Colombia, el Poeta ha dispuesto, dueño y señor de su noche de gloria, que yo cierre, por decirlo así, la marcha, batiendo en el viejo tambor de Maipo, a sincero golpe de corazón, mi ronca retreta.
Válgame eso por disculpa en la inmensa desventaja de semejante comisión, ya que siempre hay algo de marchito en el laurel de la retirada.
Dejadme deciros solamente, señores, que trataré de poner mi tambor al ritmo viril de vuestro entusiasmo; y vosotras, señoras, puesto que estáis aquí para mi consuelo, en la nunca desmentida caridad de vuestros ojos hermosos, permitidme que como quien le pasa una cinta argentina por adorno distintivo, solicite, en amable símbolo blanco y azul, el amparo de la gracia y la belleza.
Ilustre Capitán del Verbo y Señor del Ritmo.
Habéis dado de prólogo al Magno Canto lo único que sin duda correspondía: la voz de la tierra en el estruendo del volcán; la voz del aire en el viento de la selva; la rumorosa voz del agua en el borbollón de la catarata.
Así os haré a mi vez el comentario que habéis querido. Os diré el Ayacucho que vemos desde allá, en el fuego que enciende sobre las cumbres cuya palabra habéis sacado a martillazo de oro y hierro, el sol de los Andes; y como tengo por el mejor fruto de una áspera vida el horror de las palabras vanas, procuraré dilucidar el beneficio posible que comporta para los hombres de hoy esa lección de la espada.
Tal cual en tiempo del Inca, cuando por justo homenaje al Hijo del Sol traíanle lo mejor de cada elemento natural las ofrendas de los países, la República Argentina ha enviado al glorioso Perú de Ayacucho todo cuando abarca el señorío de su progreso y de su fuerza.
Y fue, primero, la inolvidable emoción de aquel día, cuando vimos aparecer sobre la perla matinal del cielo limeño al fuerte mozo que llegaba, trayéndose de pasada un jirón de cielo argentino prendido a las alas revibrantes de su avión.
Y fue el cañón argentino del acorazado que entraba, al saludo de los tiros profundos en que parece venir batiendo el corazón de la patria: lento, sombrío, formidable, rayado el casco por la mordedura verde del mar, pero tremolando el saludo del Plata inmenso en la sonreída ondulación del gallardete.
Y fueron los militares que llegaban, luciendo el uniforme de los granaderos de San Martín, y encabezados -permiso mi general- por la más competente, limpia y joven espada del comando argentino, por supuesto que sin mengua de ninguna, para traer en homenaje la montaña de los cóndores y la pampa de los jinetes.
Y es la inteligencia argentina que va llegando en la persona de sus más eminentes cultores, y que me inviste por encargo de anticipo, que no por mérito, con la representación de la Academia Nacional de Ciencias de Córdoba, la Universidad de La Plata, el Círculo Argentino de Inventores, el Círculo de la Prensa, el Conservatorio Nacional de Música, la Asociación de Amigos del Arte, y el Consejo Nacional de Educación que adelanta, así, al Perú el saludo de cuarenta mil maestros.
Y por último, que es mi derecho y el más precioso, porque constituye mi único bien personal, aquel jilguero argentino que en el corazón me canta la canción eternamente joven del entusiasmo y del amor.
Por él me tengo yo sabida como si hubiese estado allá la belleza heroica de Ayacucho. El embajador argentino general Justo, ministro de Guerra.
Al son de cuarenta dianas despierta el campo insurgente bajo la claridad de oro y la viva frescura de una mañana de combate. Deslumbra en el campo realista el lujo multicolor de los arreos de parada. En el patriota, el paño azul obscuro uniforma con pobreza monacal la austeridad de la república. Apenas pueden, allá, lucir al sol tal cual par de charreteras; y con su mancha escarlata, provocante el peligro, la esclavina impar de Laurencio Silva, el tremendo lancero negro de Colombia.
Mas he aquí que restableciendo por noble inclinación las costumbres de la guerra caballeresca, los oficiales de ambos ejércitos desatan sus espadas y vienen al terreno intermedio para conversar y despedirse antes de dar la batalla. Con que, amigos de otro tiempo y hermanos carnales, que también los hay, abrázanse allá a la vista de los ejércitos, sin disimular sus lágrimas de ternura. Y baja de la montaña Monet, el español arrogante y lujoso, peinada como a tornasol la barba castaña, para prevenir a Córdova el insurrecto que va a empezar el combate.
Aquel choque foral es un modelo de hidalguía y de bravura. Concertado como un torneo, dirigida la victoria con precisión estética por el joven mariscal, elegante y fino a su vez como un estoque, nada hubo más sangriento en toda la guerra: como que, en dos horas, cayó la cuarta parte de los combatientes. Mientras la división de Córdova acomete al son sentimental del bambuco, el batallón Caracas, esperando su turno, que será terrible, juega bajo las balas los dados de la muerte.
Desprovistos de artillería los patriotas y perdida pronto la realista cuyos cañones del centro domina al salto, como a verdaderos potros de bronce, el sargento Pontón, la batalla no es más que una cuádruple carga de sable, lanza y bayoneta.
Carga de Córdova, el de la célebre voz de mando, que, alta la espada, lánzase a cabeza descubierta, encrespándosele en oro la prosapia de Aquiles al encenderle el sol su pelo bermejo. Carga de Laurencio Silva que harta su lanza en el estrago de ocho escuadrones realistas. Carga de Lara que cierra el cerco de muerte, plantando en el corazón del ejército enemigo el hierro de sus moharras.
Cuando he aquí que la última carga va a decidir la victoria. Son los Húsares Peruanos de Junín, al mando del coronel argentino Suárez. Y entre ellos, a las órdenes de Bruix, los ochenta últimos Granaderos a Caballo. De los cuatro mil hombres que pasaron los Andes con San Martín, sólo esos quedan. Pintan ya en canas los más: sus sables hállanse reducidos por mitad al rigor de la amoladura que saca filo hasta la guarda Y en ese instante, desde la reserva que así les da la corona del postrer episodio, meten espuela y se vienen. Véanlos cruzar el campo, ganando la punta de su propio torbellino. Ya llegaron, ya están encima. Una rayada, un relámpago, un grito: ¡Viva la Patria!...― y al tajo, volcada en rosas de gloria la última sangre de los soldados del rey.
Esas lágrimas de Ayacucho van a justificar el recuerdo de otras que me atrevo a mencionar, animado por la cordialidad de vuestra acogida.
Y fue que una noche de mis años, allá en mi sierra natal, el adolescente que palidecía sobre el libro donde se narraba el crucero de Grau, veía engrandecérsele el alma con las hazañas del pequeño monitor, embellecidas todavía por la bruma de la desgracia. Y sintiendo venírsele a la garganta un llanto en cuya salumbre parecía rezumar la amargura del mar lejano, derramaba en el seno de las montañas argentinas, sólo ante la noche y las estrellas de la eternidad, lágrimas obscuras lloradas por el Huáscar.
Señores: Dejadme procurar que esta hora de emoción no sea inútil. Yo quiero arriesgar también algo que cuesta mucho decir en estos tiempos de paradoja libertaria y de fracasada, bien que audaz ideología.
Ha sonado otra vez, para bien del mundo, la hora de la espada.
Así como ésta hizo lo único enteramente logrado que tenemos hasta ahora, y es la independencia, hará el orden necesario, implantará la jerarquía indispensable que la democracia ha malogrado hasta hoy, fatalmente derivada, porque ésa es su consecuencia natural, hacia la demagogia o el socialismo. Pero sabemos demasiado lo que hicieron el colectivismo y la paz, del Perú de los Incas y la China de los mandarines.
Pacifismo, colectivismo, democracia, son sinónimos de la misma vacante que el destino ofrece al jefe predestinado, es decir al hombre que manda por su derecho de mejor, con o sin la ley, porque ésta, como expresión de potencia, confúndese con su voluntad.
El pacifismo no es más que el culto del miedo, o una añagaza de la conquista roja, que a su vez lo define como un prejuicio burgués. La gloria y la dignidad son hijas gemelas del riesgo; y en el propio descanso del verdadero varón yergue su oreja el león dormido.
La vida completa se define por cuatro verbos de acción: amar, combatir, mandar, enseñar. Pero observad que los tres primeros son otras tantas expresiones de conquista y de fuerza. La vida misma es un estado de fuerza. Y desde 1914 debemos otra vez a la espada esta viril confrontación con la realidad.
En el conflicto de la autoridad con la ley, cada vez más frecuente, porque es un desenlace, el hombre de espada tiene que estar con aquélla. En esto consisten su deber y su sacrificio. El sistema constitucional del siglo XIX está caduco. El ejército es la última aristocracia, vale decir la última posibilidad de organización jerárquica que nos resta entre la disolución demagógica. Sólo la virtud militar realiza en este momento histórico la vida superior que es belleza, esperanza y fuerza.
Habría traicionado, si no lo dijera así, el mandato de las espadas de Ayacucho. Puesto que este centenario, señores míos, celebra la guerra libertadora; la fundación de la patria por el triunfo; la imposición de nuestra voluntad por la fuerza de las armas; la muerte embellecida por aquel arrebato ya divino, que bajo la propia angustia final siente abrirse el alma a la gloria en la heroica desgarradura de un alarido de clarín.
Poeta, hermano de armas en la esperanza y la belleza: ahí está lo que puede hacer.
Gracias, dulce ciudad de las sonrisas y de las rosas. Laureles rindo a tu fama, que así fueran de oro fino en el parangón de homenaje, y palmas a tu belleza que hizo flaquear ― dichoso de él en su propia dimensión ― al Hombre de los Andes con su estoicismo. ¿Pues quién no sabía por su bien ― y por su mal ― que ojos de limeña eran para jugarles, no ya el infierno, puesto que en penas lo daban, sino la misma seguridad del Paraíso? En el blanco de tus nubes veo embanderarse el cielo con los colores de mi Patria, y dilatarse en el tierno azul la caricia de una mirada argentina. Y generosas me ofrecen la perla de la intimidad y el rubí de la constancia, tus sonrisas de amistad y tus rosas de gentileza.
Y tú, nación de Ayacucho, tierra tan argentina por lo franca y por lo hermosa; patria donde no puedo ya sentirme extranjero, Patria mía del Perú: vive tu dicha en la inmortalidad, vive tu esperanza, vive tu gloria.
LEOPOLDO LUGONES


  • 1er. golpe de estado: 06 de septiembre de 1930 "La hora de la espada".
  • El fraude patriótico.


La década del ´30


La década infame



El 30 y la metafísica del Tango





La hora de la espada (Leopoldo Lugones)


Pacto Roca - Runciman - El debate de las carnes en la década de 1930
1° de mayo de 1933

“La industria más genuina del suelo argentino, la ganadería, se encuentra en ruinas por obra de dos factores principales: la acción extorsiva de un monopolio extranjero y la complicidad de un gobierno que unas veces la deja hacer y otras la protege directamente.” Así comenzó el senador Lisandro de la Torre su acusación contra el gobierno y los grupos económicos en la tarde del 18 de junio de 1935.
Dos años antes, el 1° de mayo de 1933 el gobierno argentino había firmado con Inglaterra el tratado  Roca-Runciman para garantizar la exportación de una cuota de carne en condiciones lamentables ante las medidas restrictivas tomadas por Gran Bretaña. Ésta en 1932 se había reunido en Ottawa, Canadá, con sus colonias y ex colonias para reorganizar su comercio exterior y había decido adquirir en Canadá, Australia y Nueva Zelanda los productos que antes compraba a la Argentina.

En los sectores ganaderos exportadores argentinos hubo un gran desconcierto: la metrópolis los había abandonado. El presidente Agustín P. Justo, parte integrante del movimiento golpista que depuso al presidente constitucional de Hipólito Yrigoyen y un fiel representante de los sectores ganaderos exportadores envió a Londres al vicepresidente Julio A. Roca (hijo) para llegar a un acuerdo. Éste adujo sin ruborizarse que la Argentina era, desde el punto de vista económico, una parte integrante del imperio británico. Otro miembro de la delegación sostuvo a su turno que "la Argentina es una de las joyas más preciadas de su graciosa majestad".

El resultado fue la firma de un acuerdo con el ministro de Comercio británico, Sir Walter Runciman, conocido como “pacto Roca–Runciman”. Por éste, Inglaterra se comprometía a seguir comprando carnes argentinas siempre y cuando su precio fuera menor al de los demás proveedores. En cambio, la Argentina aceptó concesiones lindantes con la deshonra: liberó los impuestos que pesaban sobre los productos ingleses y se comprometió a no permitir la instalación de frigoríficos argentinos. Se creó el Banco Central de la República Argentina con funciones tan importantes como la emisión monetaria y la regulación de la tasa de interés, en cuyo directorio había una importante presencia de funcionarios ingleses. Finalmente se le otorgó el monopolio de los transportes de la capital a una corporación inglesa.

El senador demócrata progresista Lisandro de la Torre denunció el acuerdo en el Senado y promovió el debate. "El gobierno inglés le dice al gobierno argentino ‘no le permito que fomente la organización de compañías que le hagan competencia a los frigoríficos extranjeros’. En esas condiciones no podría decirse que la Argentina se haya convertido en un dominio británico, porque Inglaterra no se toma la libertad de imponer a los dominios británicos semejantes humillaciones. Los dominios británicos tiene cada uno su cuota de importación de carnes y la administran ellos. La Argentina es la que no podrá administrar su cuota. No sé si después de esto podremos seguir diciendo: ‘al gran pueblo argentino salud’.”

En mayo de 1935, el legislador santafesino acusó por fraude y evasión impositiva a los frigoríficos Anglo, Armour y Swift. Aportó pruebas que comprometían directamente a dos ministros de Justo: Pinedo de Economía y Duhau de Hacienda, en las que se establecía claramente el trato preferencial que recibían estas empresas que prácticamente no pagaban impuestos y a las que nunca se las inspeccionaba, mientras que los pequeños y medianos frigoríficos nacionales eran abrumados por continuas visitas de inspectores impositivos. De la Torre probó cómo se ocultaba información contable en cajas selladas por el ministerio de Hacienda y demostró hasta dónde llegaba la impunidad de los frigoríficos ingleses tras la firma del pacto Roca-Runciman. 

El nivel de las discusiones en el senado fue subiendo de tono hasta que se decidió hacer callar a De la Torre. Un matón del Partido Conservador, el ex comisario Ramón Valdez Cora, atentó contra la vida del senador, pero el que murió fue su amigo y compañero de bancada Enzo Bordabehere. Se dio por terminado el debate.

Fuente: www.elhistoriador.com.ar

TRATADO ROCA-RUNCIMAN (1933)

Contenido de este documento: Ley 11.693 (225), Convención y Protocolo sobre inter- cambio comercial con gran Bretaña e Irlanda del Norte, firmados en Londres el IV de mayo de 1933 (B.O. 8/VIII/933).

LEY 11.693

Art. 1° - Apruébese la convención y el protocolo sobre intercambio comercial, subscripto el 1° de mayo de 1933 por el Excmo. Señor vicepresidente de la Nación, doctor Julio A. Roca, con el gobierno de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
Art. 2° - Comuníquese, etc. Sanción: 28 de julio de 1933. Promulgación: 31 de julio 1933.

CONVENCION

Convención y protocolo, firmado en Londres el 1° de mayo de 1933, entre el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y el gobierno de la República Argentina.

El gobierno del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte y el gobierno de la República Argentina, reafirmando su común propósito de mantener y perfeccionar el tratado de amistad, comercio y navegación firmado en Buenos Aires, el 2 de febrero de
1825, y, considerando que, para acrecentar y facilitar el intercambio comercial entre la República Argentina por una parte y el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte por la otra, es convincente completar dicho tratado de 1825 con algunas disposiciones adicionales concernientes a las relaciones comerciales entre ambos países, y deseando concertar una convención con ese objeto, han convenido lo siguiente.

Art. 1° - 1. El gobierno del Reino Unido, reconociendo plenamente la importancia de la industria de la carne vacuna enfriada “chilled beef” en la vida económica de la República Argentina, no impondrá ninguna restricción a las importaciones en el Reino Unido de carne vacuna enfriada procedente de la Argentina, en cualquier trimestre del año, que reduzca las importaciones a una cantidad inferior a la importada en el trimestre correspondiente del año terminado el 30 de junio de 1932, a menos y tan sólo, cuando a juicio del gobierno del Reino Unido, después de haber consultado al gobierno Argentino e intercambiado con éste toda información pertinente, ello fuera necesario para asegurar un nivel remunerativo de precios del mercado del Reino Unido; tal restricción no será mantenida si resultara que las importaciones así excluidas fueran reemplazadas por aumentos de las importaciones en el Reino Unido de otras clases de carnes (siempre que no se trate de embarques experimentales de carne vacuna enfriada de otras partes de la Comunidad Británica de Naciones) que vinieran a neutralizar el efecto deseado sobre los precios.

2.- Si debido a circunstancias imprevistas, el gobierno del Reino Unido considera necesario que las importaciones de carne vacuna enfriada de la Argentina en el Reino Unido sean reducidas en cualquier año, en un volumen mayor del 10% por debajo de la cantidad importada en el año terminado el 30 de junio de 1932, consultará con el gobierno Argentino y con los gobiernos de los otros principales países exportadores (con inclusión de los que forman parte de la Comunidad Británicas de Naciones), con el objeto de convenir la reducción en las importaciones de carne vacuna enfriada y congelada de todos los países productores. El gobierno del Reino Unido no reducirá las importaciones de carne vacuna enfriada de la Argentina en un monto mayor del 10% por debajo de esa cantidad importada en el año terminado el 30 de junio de 1932, a menos que las importaciones de carne vacuna enfriada (excluidos los razonables embarques de carácter experimental), o de carne congelada en el Reino Unido procedentes de todos los países exportadores de carne que forman parte de la Comunidad Británica de Naciones, sean reducidas también en un porcentaje igual al porcentaje de reducción de la carne vacuna enfriada argentina por debajo del 90% de la cantidad importada en el trimestre correspondiente del año terminado el 30 de junio de 1932. el gobierno del Reino Unido se compromete a no imponer ninguna restricción a las importaciones en el Reino Unido de carne vacuna u ovina congelada mayor que las especificadas en la planilla H del convenio celebrado ente el gobierno del Reino Unido y el gobierno de la Confederación Australiana, el 20 de agosto de 1932, a menos que sean restringidas las importaciones de tales carnes procedentes de los países que forman parte de la Comunidad Británica de Naciones; y en esta eventualidad se dará a la carne argentina un tratamiento justo y equitativo y se tendrán en cuenta todas las circunstancias pertinentes.

Art. 2° - 1. Siempre que en la República Argentina, funciones un sistema de control de cambios las condiciones bajo las cuales se efectuará en cualquier año, la disponibilidad de divisas extranjeras serán tales que para satisfacer la demanda para remesas corrientes de la Argentina al Reino Unido se destine la suma total de cambio en libras esterlinas proveniente de la venta de productos argentinos en el Reino Unido, después de deducir una suma razonable anual para el pago del servicio de la deuda pública externa argentina (nacional, provincial y municipal) pagadera en países que no sean en el Reino.

2.- Previa la reserva anterior para el servicio de las deudas públicas externas, el orden en el cambio en libras esterlinas así disponible será distribuido entre las diversas categorías de solicitantes de remesas al Reino Unido, será resuelta mediante acuerdo entre el gobierno argentino y el gobierno del Reino Unido.

3.- Del cambio en libras esterlinas que quedase disponible de acuerdo con las disposiciones del párrafo 1) anterior, para las remesas de la Argentina al Reino Unido durante el año 1933, se apartará el equivalente en libras esterlinas de $ 12.000.000 m/n, con el fin de realizar pagos en efectivo hasta un importe a fijarse entre el gobierno del Reino Unido y el gobierno Argentino con respecto a cada uno de los casos de saldos en pesos que, hasta el primero de mayo de 1933, estuvieran esperando cambio en libras esterlinas para ser remitidos al Reino Unido.

4.- El gobierno Argentino ofrecerá emitir bonos en libras esterlinas en cambio de los saldos en pesos que hubiesen quedado al 1° de mayo de 1933, a la espera de cambio en libras esterlinas para ser remitidos al Reino Unido, después de haberse agotado, los 12.000.000 m/n, a que se refiere el parágrafo precedente. Estos bonos serán emitidos a la par, a un plazo de 20 años, comenzando su amortización a los 5 años de su emisión y devengarán un interés del 4% anual.

El tipo de conversión y demás condiciones de los bonos serán convenidos entre el gobierno argentino y será una comisión de representantes de los tenedores de los saldos en cuestión.

5.- El gobierno argentino se compromete a que en ningún caso las solicitudes de cambio para remesas al Reino Unido, ya sea con respecto a los saldos en pesos o a las transacciones correspondientes, serán tratadas menos favorablemente que las solicitudes similares de cambio para remitir a cualquier otro país.

6.- El gobierno del Reino Unido cooperará en la medida que le sea posible con el gobierno argentino a fin conseguir que la cantidad de cambio en libras esterlinas obtenido en la Argentina por la exportación de productos argentinos al Reino Unidos corresponda lo más exactamente que sea posible con el valor obtenido por tales productos en el mercado del Reino Unido, teniéndose debidamente en cuenta las deducciones necesarias en concepto de fieles, seguros, etc.

Art. 3°.- 1. Entre las partes contratantes se concluirá tan pronto como sea posible, un convenio suplementario que será considerado como parte integrante y esencial de esta convención, que tendrá disposiciones relativas a los derechos y otros gravámenes similares, así como las regulaciones cuantitativas a ser aplicadas a las mercaderías del Reino Unido en la República Argentina y las similares a ser aplicadas a las mercaderías argentinas en el Reino Unido.

2.- Si tal convenio suplementario no se hubiera realizado antes del 1° de agosto de 1933, cualquiera de las partes contratantes puede, a pesar de las disposiciones del art. 6°, dar por terminada esta convención en cualquier tiempo posterior con previo aviso de un mes.

Art. 4° - 1. Ninguna disposición de la presente convención afectará los derechos y obligaciones emergentes del tratado de amistad, comercio y navegación firmado en Buenos Aires el 2 de febrero de 1825.

Art. 5° - 1. Las parte contratantes convienen en que cualquier divergencia que pueda surgir entre ellas relacionadas con la interpretación o aplicación de la presente convención, será sometida a pedido de una de las partes a la Corte Permanente de Justicia Internacional, a menos que en cualquier caso particular las partes contratantes convengan someter la divergencia a otro tribunal o resolverla por otro procedimiento.

Art. 6° - 1. La presente convención deberá ser ratificada. Las ratificaciones deberán ser canjeadas en Londres, tan pronto como sea posible. Entrará en vigor en la fecha del can- je de las ratificaciones. Quedará en vigencia durante tres años, a partir de la fecha en que entre en vigor y continuará en vigencia a no ser que cualquiera de las partes contratantes diese aviso a la otra por vía diplomática de la terminación de la convención. En este caso la convención se prorrogará por el término de seis meses, a partir de la fecha en que se hubiere dado aviso de su terminación.

En testimonio de lo cual los infrascriptos debidamente autorizados al efecto, han firmado la presente convención y estampado en ella sus sellos.

Dada en Londres en 1° de mayo de 1933, en duplicado, en inglés y español, siendo ambos textos igualmente auténticos.


PROTOCOLO

En el acto de firmar esta convención, en el día de la fecha, relativa al intercambio comercial entre el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte y la República Argentina los plenipotenciarios infrascriptos debidamente autorizados a este efecto por sus respectivos gobiernos, declaran:

1.- Que el Gobierno Argentino, valorando los beneficios de la colaboración del capital británico en las empresas de servicios públicos y otras ya sean nacionales, municipales o privadas, que funcionan en la República Argentina, consecuente en ello con su tradicional política de amistad se propone dispensar a tales empresas dentro de la órbita de su acción constitucional, un tratamiento benévolo que tienda a asegurar el mayor desarrollo económico del país y la debida y legítima protección de los intereses ligados a tales empresas.

2.- Que el Gobierno del Reino Unido está dispuesto a cooperar con el Gobierno Argentino para una conjunta investigación de la estructura económica y financiera y del funcionamiento del comercio de carnes, con especial referencia a los medios a adoptarse para asegurar un razonable beneficio a los ganaderos.

3.- Que en caso de que el Gobierno Argentino, o los ganaderos argentinos, bajo la acción de una ley especial, tuvieran la propiedad, control o administración de empresas que no persigan primordialmente fines de beneficio privado, sino una mejor regulación del comercio con el propósito de asegurar un razonable beneficio al ganadero, el Gobierno del Reino Unido estará dispuesto a permitir a importadores a importar carne proveniente de tales empresas hasta el 15% de la cantidad total importada de la Argentina al Reino Unido (tal porcentaje debe incluir las importaciones actualmente permitidas al Frigorífico Gualeguaychú y del Frigorífico Municipal de Buenos Aires) sobreentendiéndose que dichos embarques serán colocados eficientemente en el mercado por las vías normales, teniendo en cuenta la necesidad de la coordinación del comercio en el Reino Unido, y toda autorización concedida por el Gobierno del Reino Unido bajo las disposiciones del presente párrafo será acordada en tal inteligencia.

4.- Que el Gobierno del Reino Unido comunicará periódicamente al Gobierno Argentino el detalle de todos los permisos acordados, referentes a la importación de carne de la Argentina.

5.- Que el Gobierno del Reino Unido se compromete a no restringir las importaciones en el Reino Unido de menudencias comestibles de la Argentina, a no ser que el volumen de tales menudencias de sus procedencias sobrepase la relación normal con otras carnes importadas de la Argentina.

6.- Que es intención del Gobierno Argentino:

a)     Mantener libres de derechos el carbón y todas las otras mercaderías que actualmente se importan en la Argentina libres de derechos;

b)    Con respecto a las mercaderías en que una proporción considerable de las importaciones en la Argentina, provenga del Reino Unido y respecto de las cuales se le han sometido las proposiciones propuestas correspondientes de reducción de derechos aduaneros volver en general a las tasas y aforos de tales mercaderías en vigencia en 1930, hasta donde lo permitan las necesidades fiscales y el interés de las industrias nacionales; y además en los casos pertinentes, efectuar modificaciones en la clasificaciones respecto a las cuales el Gobierno del Reino Unido ha hecho proposiciones;

c)      Entablar conversaciones con el Gobierno del Reino Unido a objeto de considerar los medios para mantener la actual situación del carbón del Reino Unido en el mercado argentino.

7.- Que el Gobierno Argentino se compromete en lo que respecta a las mercaderías a que se refiere el párrafo 6 anterior, a no imponer, mientras esté pendiente la conclusión del acuerdo suplementario, ningún nuevo derecho, ni aumenta los existentes, ya sea por aumentos de tasas o por aumento de aforos, o por aumento en la sobretasa temporaria del 10%, o por aplicación de la sobretasa a mercaderías a las cuales no se la aplica actualmente, o por cualquier otro medio.

8.- Que el propósito del Gobierno del Reino Unido;

a)      No imponer nuevos derechos o aumento de derechos a la carne, bacon, jamones, trigo, lino, maíz y extracto de quebracho importado de la Argentina en el Reino Unido.

b)    No establecer limitaciones cuantitativas sobre las importaciones en el Reino Unido de trigo, maíz, lino, afrecho y afrechillo, rebacillo, lana en bruto “premier jus”, sebo sin refinar, cerda, tripas y extracto de quebracho;

c)      En el caso de establecerse regulaciones cuantitativas sobre mercaderías no mencionadas en el inciso b) anterior, se dará un tratamiento equitativo a aquellas mercaderías importadas de la Argentina en el Reino Unido.


9.- Que el Gobierno del Reino Unido se compromete, mientras esté pendiente la conclusión del acuerdo suplementario a no imponer o aplicar nuevos derechos de la clase a que se refiere el inciso a) del párrafo 8 anterior.

10.- Que el Gobierno Argentino designará una comisión especial a cuyas deliberaciones serán invitados a tomar parte representantes del Gobierno del Reino Unido, con el objeto de explicar y discutir el punto de vista de su gobierno. Esta comisión examinará las proposiciones hechas por el Gobierno del Reino Unido a que se refiere el párrafo 6 anterior, y preparará el acuerdo suplementario a que se refiere el art. 3° de la convención a fin de que pueda ser completada antes del 1° de agosto de 1933.

11.- El conjunto de dicha convención, incluyendo los párrafos precedentes de este protocolo, entrará en vigor provisionalmente desde la fecha de su firma, con excepción de las disposiciones del párrafo 4 del art. 2° de la convención relativo a la emisión de estos bonos no es necesario que se efectúe hasta que se realice el acuerdo suplementario a que hace referencia el art. 3°.

Dado en Londres, el 1 de mayo de 1933 en duplicado en inglés y español –Julio A. Ro- ca – W. Runciman.

Sanción: 28 de julio de 1933. Promulgación: 31 de julio de 1933.



Asesinato en el senado de la nación



Libro recomendado:
  • "Radiografía de la pampa" Ezequiel Martínez Estrada.


EJERCITACIÓN:

  1. Explique cuales fueron las causas internas y externas que llevaron a producir el primer golpe de estado en la República Argentina.
  2. ¿Por qué se denomina a este período de la historia (1930-1943) como "Década Infame"?
  3. ¿En qué consistió la llamada "Conferencia de Ottawa" del año 1932 y cuáles fueron sus consecuencias para la República Argentina?
  4. Qué fue el tratado Roca - Runciman.
  5. Qué actitud tomó el gobierno de Agustín P. Justo con respecto al rol del estado en la economía. Mencione alguna de sus medidas.




miércoles, 3 de junio de 2015

Clase 10: viernes 31/05/2024

La República Radical (1916-1930)

  Presidencia de HIPÓLITO YRIGOYEN (1916-1922).
  Presidencia de MARCELO T. DE ALVEAR (1922-1928).
  Segunda Presidencia de HIPÓLITO YRIGOYEN (1928-1930).


  • Sector social: clase media (hombres modestos, sectores populares criollos, hijos de inmigrantes).
  • Ascenso social: Profesiones liberales, comercio, producción.
  • ascenso político: acceso a los cargos públicos.

  • Semana trágica: enero de 1919. Huelga desencadenada por obreros metalúrgicos, que fue sofocada violentamente por el estado y por grupos patronales (Asociación del trabajo y Liga patriótica).
  • Reforma universitaria.
  • Yrigoyen acepta el andamiaje institucional heredado del conservadurismo. 
  • Enfrentamiento con las oligarquías provinciales a través del método de las "intervenciones federales".
  • Paternalismo.
  • Defensa del patrimonio nacional (YPF, Ferrocarriles).
  • Ineficacia económica.
División en el Radicalismo
  • Sectores Personalistas (partidarios de Yrigoyen).
  • Sectores Antipersonalista (partidarios de Alvear, con estrechos lazos con el conservadurismo).


Auge y caída del Yrigoyenismo





El Movimiento Obrero en Argentina.



Prólogo
El ángel exterminador

“Kurt Wilckens, temple diamantino,noble compañero y hermano...”
(Severino Di Giovanni,Los anunciadores de la tempestad)


Ya a esa hora —las 5.30 de la mañana— del 27 de enero de 1923, Buenos Aires presentía que la jornada iba a ser calurosa. El hombre rubio tomó el tranvía en Entre Ríos y Constitución y sacó boleto obrero. Viajaría hasta la estación Portones de Palermo, en Plaza Italia. Llevaba un paquete en la mano, que bien podría ser el envoltorio del almuerzo o algunas herramientas de trabajo. Parecía tranquilo. A las pocas cuadras de ascender se puso a leer el Deutsche La Plata Zeitung que llevaba bajo el brazo.
Bajó en Plaza Italia y se dirigió por calle Santa Fe hacia el oeste, en dirección a la estación Pacífico. Pasó ésta y al llegar a la calle Fitz Roy se detuvo en la esquina, justo frente a una farmacia.
Son las 7.15, el sol ya pica fuerte. Hay mucho movimiento de gente, de carros, autos y vehículos de transporte. Al frente están los cuarteles del 1 y 2 de Infantería. Pero el hombre rubio no mira para ese lado: sus ojos no se apartan de la puerta de la casa de Fitz Roy 2461.
¿Podrá ser hoy? Pareciera que no. Nadie sale de esa vivienda. Los minutos pasan. ¿Habrá salido más temprano? ¿Tendrá alguna sospecha?
No, ahí está. De esa casa sale un militar. Son las 7.55. Pero otra vez lo mismo: lleva una niñita de la mano. El hombre rubio hace un imperceptible gesto de contrariedad. Aunque ahora el militar se detiene y conversa con la niña. Ésta le dice que se siente mal. El militar la alza rápidamente en brazos y la entra nuevamente en la casa.
Apenas pasan unos segundos y ahora sí, el militar sale solo. Va vestido con uniforme de diario y sable al cinto. Se encamina hacia la calle Santa Fe por la misma vereda en la que está el hombre rubio. En su paso enérgico se nota su carácter firme. Y ahora va al encuentro de su muerte en una mañana hermosa, tal vez un poco calurosa.
Es el famoso teniente coronel Varela. Más conocido por el “comandante Varela”. El hombre más aborrecido y odiado por los obreros. Lo llaman el “fusilador de la Patagonia”, el “sanguinario”; lo acusan de
haber ejecutado en el sur a 1500 peones indefensos. Les hacía cavar las tumbas, luego los obligaba a desnudarse y los fusilaba. A los dirigentes obreros los mandaba apalear y sablear antes de dar la orden de pegarles cuatro tiros.
¿Es así el comandante Varela, tal cual dice la leyenda? Es así, a los ojos del hombre rubio que lo está esperando.
Ese hombre rubio no es pariente de ninguno de los fusilados, ni siquiera conoce la Patagonia ni ha recibido cinco centavos para matarlo. Se llama Kurt Gustav Wilckens. Es un anarquista alemán de tendencia
tolstoiana, enemigo de la violencia. Pero que cree que ante la violencia de arriba, en casos extremos, la única respuesta debe ser la violencia. Y cumplirá con lo que cree un acto individual justiciero.
Cuando lo ve venir, Wilckens no vacila. Va a su encuentro y se mete en el zaguán de la casa que lleva el número 2493 de Fitz Roy. Allí lo espera.
Ya se oyen los pasos del militar. El anarquista sale del zaguán para enfrentarlo. Pero no todo será tan fácil. En ese mismo momento cruza la calle una niña y se coloca sólo a tres pasos delante de Varela, caminando en su misma dirección.
Wilckens ya no tiene tiempo: la aparición de la niña echa por tierra sus planes. Pero se decide. Toma a la chica de un brazo, la quita de en medio, mientras le grita:
—¡Corre, viene un auto!
La chica no entiende, se asusta, vacila. Varela observa la extraña escena y detiene su paso. Wilckens en vez de arrojar la bomba avanza hacia él como cubriendo con sus espaldas a la nena, que ahora sí saldrá corriendo.
Wilckens queda frente a Varela y arroja la bomba al piso, entre él y el militar. Es un explosivo de percusión, o de mano, de gran poder. Las esquirlas le dan de lleno en las piernas al sorprendido Varela. Pero también a Wilckens, quien al sentir el dolor punzante vuelve al zaguán y sube instintivamente tres o cuatro escalones. Es como para rehacerse porque la explosión ha sido tremenda y lo ha dejado aturdido. Todo dura apenas tres segundos. Wilckens baja de inmediato. Es en ese momento en que el anarquista comprende que está perdido, que no podrá huir, tiene rota una pierna (el peroné, astillado, se le mete dolorosamente entre los músculos, y el pie de la otra ha sido inmovilizado por una esquirla que le ha destrozado el empeine).
Al salir del zaguán se encuentra con Varela, quien tiene las dos piernas quebradas y que, mientras intenta mantenerse de pie aferrándose a un árbol con el brazo izquierdo, con la mano derecha trata de desenvainar el sable. Ahora los dos heridos están otra vez frente a frente. Wilckens se aproxima arrastrando los pies y saca un revólver Colt. Varela pega un bramido que más es un estertor como para asustar a ese desconocido de ojos profundamente azules que lo va a fusilar. El comandante se va cayendo, pero no es de ésos que se entregan o piden misericordia. Sigue tironeando del sable que no quiere salir de la vaina. Ya sólo faltan veinte centímetros. Varela está todavía seguro de que lo va a poder desenvainar, cuando recibe en el pecho el primer balazo. No le quedan fuerzas y empieza a resbalar despacito por el tronco y tiene todavía tiempo y voz para rajarle una puteada al que lo está fusilando. El segundo balazo le rompe la yugular. Wilckens descarga el tambor entero. Todos los impactos son mortales. Varela ha quedado como enroscado en el árbol.
La explosión y los tiros han provocado el desmayo de mujeres y la huida de hombres y espantada de caballos. El teniente coronel Varela ha muerto. Ejecutado. Su atacante está mal herido. Hace un supremo esfuerzo para llegar a la calle Santa Fe. La gente ya empieza a asomarse y a arremolinarse. Presintiendo lo peor, la esposa de Varela ha salido a la calle y la pobre ha visto a su marido muerto, así despenado en forma tan dramática.
Mientras tanto, algunos vecinos se lanzan sobre el caído y lo empiezan a levantar para llevarlo a la farmacia de la esquina. Otros siguen de cerca a ese extraño extranjero con aspecto de marinero nórdico. Le tienen recelo porque lleva todavía el arma en la mano derecha. Pero ya se aproximan a toda carrera dos vigilantes: Adolfo González Díaz y Nicanor Serrano. Cuando están a pocos pasos de Wilckens desenfundan sus armas, pero no tienen necesidad de hacer nada porque él les está ofreciendo, de culata, su propio revólver. Le quitan el arma y le oyen decir en mal castellano:
—He vengado a mis hermanos.
Por toda respuesta, el agente Serrano —el “negro” Serrano, como lo conocen en la comisaría 31ª— le rompe la boca de una trompada y le aplica un preciso rodillazo en los testículos. A Wilckens se le ha caído el sombrero, uno de esos típicos sombrerones alemanes de ala ancha, con la copa partida y el moño de la cinta detrás. Así se lo llevan, con la cabeza descubierta y haciendo extraños equilibrios con las piernas heridas, como un tero con las patas quebradas.
Se iniciaban así las venganzas por la represión obrera más sangrienta del siglo veinte, salvo el periodo de la dictadura de Videla. El primer capítulo se había desarrollado allá, dos años atrás, bien al sur, en la Patagonia, entre el frío y el eterno viento austral, con las huelgas rurales más extendidas de toda la tierra sudamericana.

La Patagonia Rebelde
Osvaldo Bayer




Movimiento Obrero




La patagonia rebelde



Quebracho



EJERCITACIÓN:

1. Basándose en el capítulo XI de Breve historia de la Argentina, de José Luis Romero: haga una línea de tiempo con los principales sucesos que corresponden al período de 1916-1930.

2. Caracterice a los sectores sociales que llegaron al poder en 1916.

3. Explique los dos sucesos que evidenciaron la conflictividad social en el primer gobierno de Hipólito
Yrigoyen.

4. ¿Qué era la llamada "Liga Patriótica" y cuál fue su participación en los conflictos sociales?

5. ¿En qué consistió la llamada reforma universitaria de 1918?

6. ¿Cuáles fueron las características políticas de Hipólito Yrigoyen?

7. Explique las características del gobierno de Marcel T. de Alvear.

8. Explique la división del radicalismo.

9. Basándose en el texto "La semana trágica de enero de 1919" de Julio Godio, capítulo 1: ¿Indique cuáles fueron los motivos del conflicto obrero?

10.  Basándose en el texto "La semana trágica de enero de 1919" de Julio Godio, capítulo 2: 
  1. Indique cual era la composición y origen de la clase obrera argentina.
  2. ¿Cuál era la relación que mantenía el gobierno con los sindicatos hasta 1916 y cómo cambia esa relación a partir del ascenso del radicalismo?







martes, 26 de mayo de 2015

Clase 09: viernes 25/05/2024

La república Liberal (1880-1916):

Presidencia de Julio Argentino Roca (1880-1886): "Paz y Administración".
Presidencia de Miguel Juárez Celman (1886-1890).
Presidencia de Carlos Pellegrini (1890-1892).
Presidencia de Luis Sáenz Peña (1892-1895).
Presidencia de José Evaristo Uriburu (1895-1898).
Presidencia de Julio Argentino Roca (1898-1904).
Presidencia de Manuel Quintana (1904-1906).
Presidencia de José Figueroa Alcorta (1906-1910).
Presidencia de Roque Sáenz Peña (1910-1914).
Presidencia de Victorino de la Plaza (1914-1916).


El Partido autonomista Nacional
  • Transformación demográfica del país.
  • Cambios económicos (ganadería y agricultura).
  • Frigoríficos.
  • construcción red ferroviaria.
  • Empréstitos extranjeros.
  • Ley de Registro civil.
  • Ley de educación obligatoria.
  • Principio de autonomía de las universidades.

  • Nacimiento del proletariado industrial.
  • Club socialista: celebración en 1890 del 1ro de mayo.
  • Fundación de la Unión Cívica: Leandro N. Alem.
  • Quiebre del Banco Nacional y del Banco de la Provincia de Buenos Aires.
  • Ley de residencia.


La generación del 80
  • La república Liberal (conservadora) 1880-1916.
  • La inmigración europea.
  • El conventillo.



La Generación del ´80




El Modelo Agroexportador



La República Conservadora



Libros recomendados:
  • "La cautiva" Esteban Echeverría.
  • "El matadero" Esteban Echeverría.
  • "Una excursión a los Indios Ranqueles" Lucio V. Mansilla.
  • "Facundo" Domingo F. Sarmiento.
  • "Martín Fierro" José Hernández.
  • "Sin Rumbo" Eugenio Cambaceres.
  • "En la sangre" Eugenio Cambaceres.
  • "indios, Ejército y Frontera" David Viñas.
  • "Juvenilla" Miguel Cané.
  • "La otra Juvenilla" Santiago Garaño, Werner Pertot y José Pablo Feinmann
  • "Soy Roca" Félix Luna

EJERCITACIÓN:

  1. Siguiendo a José Luis Romero, en "Breve Historia de la Argentina", ¿Cómo caracteriza al período denominado La república: estabilización política y cambio económico-social, ¿en el capítulo IX?
  2. Explique la consigna del presidente Julio Argentino Roca "Paz y administración".
  3. ¿Qué fue la denominada "generación del ´80"?
  4. Vea el video "El Modelo Agroexportador", del ciclo documental Argentina siglo XX, de canal encuentro y haga una reflexión sobre el llamado Modelo Agroexportador.
  5. Vea el video "La república Conservadora", del ciclo documental Argentina siglo XX, de canal encuentro y realice una línea de tiempo con sus principales sucesos.

lunes, 18 de mayo de 2015

Clase 8: viernes 17/05/2024

"La campaña del desierto"

Desierto, ta.
(Del lat. desertus).
1. adj. Despoblado, solo, inhabitado.
2. adj. Dicho de una subasta, de un concurso o de un certamen: Que no ha tenido adjudicatario o ganador.
3. m. Lugar despoblado.
4. m. Territorio arenoso o pedregoso, que por la falta casi total de lluvias carece de vegetación o la tiene muy escasa.
clamar en el ~.
1. loc. verb. coloq. predicar en desierto.
predicar en desierto, o en el ~.
1. locs. verbs. coloqs. Intentar, infructuosamente, persuadir a quienes no están dispuestos a admitir razones o ejemplos.
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Enfiteusis: (Del lat. emphyteusis, y este del gr. ἐμφύτευσις, implantación).
1. f. Der. Cesión perpetua o por largo tiempo del dominio útil de un inmueble,
mediante el pago anual de un canon y de laudemio por cada enajenación de dicho
dominio. U. t. c. m.
2. f. Der. contrato enfitéutico.



Ley Enfiteusis (como garantía del Empréstito Baring Brothers)
Sancionada el 18 de mayo de 1826.

Art. 1º Las tierras de propiedad pública, cuya enajenación por la ley del 15 de febrero es prohibida en todo el territorio del Estado, se darán en enfiteusis durante el termino, cuando menos, de 20 años, que empezaran a contarse desde el 1º de enero de 1827.
Art. 2º En los primeros diez años, el que los reciba en esta forma pagará al tesoro público la renta o canon correspondiente a un ocho por ciento anual sobre el valor que se considere a dichas tierras, sin son de pastoreo, o a un cuatro por ciento si son de pan llevar.
Art. 3º El valor de la tierra será graduado en términos equitativos por un jury de cinco propietarios de los más inmediatos, en cuanto pueda ser, al que ha de justipreciarse, o de tres en caso de no haberlos en ese número.
Art. 4º El gobierno reglará la forma en que ha de ser nombrado el jury del que habla el artículo anterior, y el juez que ha de presidirlo.
Art. 5º Si la evaluación hecha por el jury fuese reclamada, o por parte del enfiteuta, o por la del fisco, resolviera definitivamente un segundo jury, compuesto del mismo modo que el primero.
Art. 6º La renta o canon que por el artículo 2º se establece, empezara a correr desde el día en que al enfiteuta se mande dar posesión del terreno.
Art. 7º El canon correspondiente al primer año se satisfacerá por mitad en los dos años siguientes.
Art. 8º Los periodos en que ha de entregarse el canon establecido, serán acordados por el Gobierno.
Art. 9º Al vencimiento de los diez años que se fijan en el artículo 2º, la Legislatura Nacional reglará el canon que ha de satisfacer el enfiteuta en los años siguientes sobre el nuevo valor que se graduará entonces a las tierras en la forma que la legislatura acuerde.



Video visto en clase:



Campaña del Desierto




Películas sugeridas:

Cuatro Lonkos





Pampa Bárbara




Martín Fierro





La guerra Gaucha




Bernardino Rivadavia (1780-1845)


Autor: Felipe Pigna

Bernardino Rivadavia, el primer presidente argentino, nació en Buenos Aires el 20 de mayo de 1780. Inició sus estudios en el Colegio de San Carlos en 1798 donde cursó Gramática, Filosofía y Teología, pero no se graduó en ninguna de estas materias, abandonando los estudios en 1803.

Durante las invasiones inglesas. Se incorporó a las milicias con el grado de Capitán en el cuerpo de "gallegos" donde tuvo una destacada actuación. El 14 de agosto de 1809, a los 29 años se casó con una joven muy distinguida de la sociedad porteña: Juana del Pino y Balbastro, hija del octavo virrey del Río de la Plata, Joaquín del Pino. El matrimonio Rivadavia se muda a la calle Defensa 453 donde nacerán sus cuatro hijos: Benito, Constancia, que morirá a los cuatro años, Bernardino y Martín.

Rivadavia participó del Cabildo Abierto del 22 de Mayo y votó contra la continuidad del virrey. Pero no tuvo un rol protagónico en los sucesos de mayo. En el enfrentamiento entre saavedristas y morenistas, tomó partido por estos últimos. Cuando tras meses de enfrentamientos el 22 de setiembre de 1811 fue creado el primer Triunvirato, integrado por Juan José Paso, Feliciano Chiclana y Manuel de Sarratea; Rivadavia fue nombrado Secretario de Gobierno y Guerra. En el Triunvirato la personalidad política de Rivadavia se impuso desde el primer momento y se tornó protagónica. No pocos compararon al triunvirato con los tres mosqueteros que eran tres pero eran cuatro y el cuarto era el más influyente de todos.

Sancionó e hizo jurar el 19 de diciembre de 1811, el Estatuto, por el cual el Triunvirato se transformaba en la autoridad máxima, disolviendo la Junta Grande. Esto provocó un gran descontento en el interior y le dio un carácter autoritario al Triunvirato. La llegada de San Martín y Alvear a Buenos Aires, en 1812, y la creación de la Logia Lautaro, se convirtieron en un escollo para el poder de Rivadavia, al que se sumaría la palabra y la acción de Bernardo de Monteagudo desde la Sociedad Patriótica. Todos estos elementos, sumados a las sucesivas derrotas militares sufridas por los ejércitos patriotas, precipitaron los acontecimientos y provocaron la "revolución" del 8 de octubre de 1812, el primer golpe de estado de la historia argentina. Ese día, las tropas de San Martín y otros cuerpos militares, se hicieron eco del descontento popular y derrocaron al primer Triunvirato, reemplazándolo por otro, afín a las ideas de la Logia y la Sociedad Patriótica, compuesto por Nicolás Rodríguez Peña, Juan José Paso y Antonio Alvarez Jonte.

Tras esta derrota, Rivadavia desapareció por dos años de la escena política, hasta que el Director Supremo, Gervasio Posadas, le encargó en 1814 junto a Manuel Belgrano una misión diplomática en Europa, con el objeto de obtener apoyos para la revolución. El fracaso de la misión fue rotundo. Belgrano regresó en 1816, pero Rivadavia permaneció en Londres hasta 1820.

En Europa tomó contacto con círculos intelectuales, políticos y económicos de España e Inglaterra que le proporcionaron gran parte de su formación y le aportaron importantes contactos que le serían muy útiles en los años venideros.

Tras el tumultuoso año 20 y la caída de las autoridades nacionales, Martín Rodríguez fue nombrado, en abril de 1821, gobernador titular de Buenos Aires con "facultades extraordinarias sin límite de duración", "protector de todos los derechos y conservador de todas las garantías", designó a Bernardino Rivadavia como Ministro de Gobierno, un cargo muy importante equivalente al de un Primer Ministro actual .

En su discurso de asunción decía Rivadavia: "La provincia de Buenos Aires debe plegarse sobre sí misma, mejorar su administración interior en todos los ramos; con su ejemplo llamar al orden los pueblos hermanos; y con los recursos que cuenta dentro de sus límites, darse aquella importancia con que debía presentarse cuando llegue la oportunidad deseada de formar una nación."

Tomás de Iriarte en sus memorias define al gobernador Martín Rodríguez como a "un hombre vulgar, un gaucho astuto que tuvo buena elección de ministros y fue dócil para dejarse gobernar."

Rivadavia había regresado de Inglaterra muy entusiasmado por las doctrinas económicas y políticas vigentes en la capital de la Revolución Industrial.

Allí había conocido al ensayista político Jeremy Bentham y a través de él apreció las obras de Adam Smith, David Ricardo, Bacon, Locke y Newton.

Le decía en una carta a su amigo Bentham "¡Qué grande y gloriosa es vuestra patria!, mi querido amigo. Cuando considero la marcha que ella sola ha hecho seguir al pensamiento humano, descubro un admirable acuerdo con la naturaleza que parece haberla destacado des resto del Mundo a propósito."

Pero la situación de la Provincia de Buenos Aires difería enormemente de la europea. Aquí no había industrias, ni una burguesía con ganas de aplicar las nuevas técnicas del progreso y mucho menos de arriesgar sus seguras ganancias ganaderas en "aventuras industriales". En definitiva las ideas de Rivadavia que eran las del liberalismo progresista de principios de siglo, no tenían por estas tierras base de sustentación en una clase dirigente muy conservadora y desconfiada de las novedades.

De todas maneras el ministro Rivadavia llevó adelante una serie de reformas que intentaron modificar la estructura del estado bonaerense y hasta la relación de éste con el poder eclesiástico.

En noviembre de 1821 se dictó una ley de olvido para promover la pacificación que permitió el retorno de desterrados como Alvear, Sarratea, Soler, Dorrego y Pagola.

"Es preciso no acordarse, si es posible, ni de las ingratitudes, ni de los errores, ni de las debilidades que han degradado a los hombres o afligido a los pueblos en esta empresa demasiado grande y famosa. Por esto ha pensado el gobierno que obra dignamente proponiendo en esta oportunidad el adjunto proyecto de ley de olvido."

También lanzó una reforma eclesiástica que le traería graves problemas. . Suprimió los fueros eclesiásticos, que permitían a las órdenes monásticas tener sus propias cortes de justicia; confiscó las propiedades de las órdenes religiosas y creó instituciones que competían en áreas de poder e influencia que había sido patrimonio de la Iglesia: fundó la Universidad de Buenos Aires, la Sociedad de beneficencia y el Colegio de Ciencias Morales.

Entre los bienes eclesiásticos expropiados figuraba el santuario de la Virgen de Lujan porque. "el gobierno, para velar por el cumplimiento del principio de que las instituciones piadosas están obligadas a rendir a algún servicio público que contribuya a la comodidad o al sostén de la moral, y en todo caso al progreso del país que las adopta; procedió a instruirse de cuál era el objeto y servicio del santuario llamado de Luján, cuál era el estado de sus bienes y rentas y cuál su administración. Lo que ha resultado, comprobado es, que no rinde servicio alguno, y que no tiene más objeto que el culto de una imagen."

Los sacerdotes descontentos, encabezados por Gregorio Tagle, encabezaron dos conspiraciones en agosto de 1822 y marzo de 1823. Esta fue la más importante. El gobierno se enteró del intento y decidió reprimirlo. En la Plaza de la Victoria los conjurados marchaban al grito de "¡Viva la religión!" y "¡Mueran los herejes!" mientras repartían rosarios, escapularios y panfletos con rezos como este:

"De la trompa marina - libera nos Domine
Del sapo del diluvio - libera nos Domine
Del ombú empapado de aguardiente - libera nos domine
Del armado de la lengua - libera nos domine
Del anglo-gálico- libera nos Domine
Del barrenador de la tierra - libera nos Domine
Del que manda de frente contra el Papa - libera nos Domine
De Rivadavia - libera nos Domine
De Bernardino Rivadavia - libera nos Domine
Kyrie eleison - Padre Nuestro. Oración como arriba."


Dos de los complotados fueron fusilados, muchos fueron detenidos y Tagle logró huir.

Rivadavia suprimió los Cabildos, último resabio de la organización política colonial, y estableció una novedosa ley electoral que incluía el sufragio universal, con las limitaciones propias de la época. La nueva ley establecía que tenían derecho al voto

todos los hombres libres nativos del país o avecindados en él mayores de 20 años, pero sólo podían ser elegidos para los cargos públicos los ciudadanos mayores de 25 "que poseyeran alguna propiedad inmueble o industrial".

Manuel Dorrrego tuvo una importante participación en los debates sobre la ley electoral, entre otras cosas dijo entonces:

"...Y si se excluye (del voto) a los jornaleros, domésticos y empleados también ¡entonces quien queda? Queda cifrada en un corto número de comerciantes y capitalistas la suerte del país. He aquí la aristocracia del dinero, hablemos claro, el que formaría la elección sería el Banco, porque apenas hay comerciantes que no tengan giro en el Banco, y entonces el Banco sería el que ganaría las elecciones, porque él tiene relación con todas las provincias"


El Empréstito

Por iniciativa de Rivadavia, el gobierno contrató en 1824, un empréstito con la firma inglesa Baring Brothers por un millón de Libras.

El nacimiento de la Casa Baring coincide con el de la gran política financiera del Imperio Británico. Los hermanos Alexander y Francis Tornhill , son los hijos del fundador de la casa, Sir Francis Baring y los principales directivos de la misma en el momento de firmarse el empréstito con Buenos Aires. Los Baring unirán su carrera financiera a su actividad política. Alexander será nombrado por el Primer Ministro Peel, ministro de la Moneda. Su hermano Francis llegará a ser Lord de la tesorería entre, ministro de Hacienda de Inglaterra entre. Director de la Compañía de Indias y Primer Lord del Almirantazgo.

El empréstito se contrataba con el objetivo de crear pueblos en la frontera con el indio, fundar un Banco, construir una red de agua y un puerto. Los gestores fueron: Braulio Costa, Félix Castro, Miguel Riglos, Juan Pablo Sáenz Valiente y los hermanos Parish Robertson y en su conjunto se llevaron 120.000 Libras del monto total del crédito en carácter de comisión

Descontadas las comisiones de los seis gestores, dos de los cuales eran ingleses, los gastos de emisión y varias cuotas adelantadas, llegaron a Buenos Aires sólo 570.000 Libras, la mayoría en letras de cambio sobre casas comerciales británicas en Buenos Aires propiedad de los gestores del empréstito. Pero la deuda se asumía por el total: 1 millón de Libras.

El dinero del empréstito, por diversas circunstancias, no se destinó a la construcción de obras públicas como había sido previsto. Se dilapidó en gastos improductivos. Para 1904, cuando se terminó de pagar el crédito, la Argentina había abonado a la Casa Baring Brothers la suma de 23.734.766 pesos fuertes.

Todas las tierras públicas de la provincia quedaron hipotecadas como garantía del empréstito. Rivadavia decidió entonces aplicar el sistema de "enfiteusis" por el cual los productores rurales podrían ocupar y hacer producir las tierras públicas, no como propietarios sino como arrendatarios.

El monto del canon que debían pagar al Estado lo fijaban los mismos arrendatarios de manera que terminó siendo insignificante.

Los grandes propietarios aprovecharon el sistema de enfiteusis para acaparar enormes extensiones de tierra con el desembolso mínimo que les permitía la ley.

Poco después de concedido el empréstito, el 31 de marzo de 1824, llegó a Buenos Aires un nuevo Cónsul de Su majestad, Mr. Woodbine Parish. El funcionario traía la misión de firmar un tratado de Libre Comercio y Amistad cuyo texto era idéntico al impuesto por William Huskisson -jefe del "Board of trade" londinense- a todas las ex colonias de Hispanoamérica, que ambicionaban ser reconocidas.

Al mismo tiempo, este tratado impuesto por Inglaterra como requisito previo para el reconocimiento de nuestra independencia, y firmado el 2 de febrero de 1825, sellará el destino del país como nación dependiente de una nueva metrópoli que le asignó un papel inamovible en la división del trabajo que imponía al mundo: el de simple productor de materias primas y comprador de manufacturas.



En medio de una prosperidad que iba en aumento, con sus instituciones reformadas, Buenos Aires, conducida por Rivadavia, no abandonaba sus viejos planes con relación a la organización del país.

Ya a partir de 1823 la Provincia había comenzado a tender los hilos para reunir un nuevo Congreso cuyo cometido era, fundamentalmente, el de dar una Constitución al país que permitiera su organización. Se buscaba además apoyo para solucionar el problema de la Banda Oriental incorporada al Brasil con el nombre de Provincia Cisplatina.

Lentamente, la iniciativa fue prendiendo, y en diciembre de 1824 representantes de todas las provincias de la época -incluidos los de la Banda Oriental, Misiones y Tarija- comenzaron a sesionar en Buenos Aires, cuyo gobierno era ejercido por Las Heras.

El Congreso tomó diversas medidas, entre ellas la Ley Fundamental, la Ley de Presidencia y la Ley de Capital del Estado.

La Ley Fundamental promulgada en 1825, daba a las provincias la posibilidad de regirse interinamente por sus propias instituciones hasta la promulgación de la Constitución, que será  ofrecida a su consideración y no será  promulgada ni establecida hasta que haya sido aceptada.

Este promisorio comienzo sufrirá sus primera  grietas el 6 de febrero de 1826 con la creación del cargo de Presidente de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Los defensores del proyecto pretendieron utilizar la situación de guerra con el Brasil, para transformar en permanente el cargo provisorio que había sido delegado en el gobierno de Buenos Aires.

El candidato elegido fue Bernardino Rivadavia, lo que molestó aún más a las provincias puesto que representaba a la tendencia unitaria.

Buenos Aires es "el sitio más despreciable que jamás vi, estoy cierto que me colgaría de un árbol si esta tierra miserable tuviera árboles apropiados. . . " Así escribía, tres meses después de su llegada a estas tierras, John Ponsonby, barón de Imokilly, enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Gran Bretaña ante las Provincias Unidas. Woodbine Parlsh, afectado por la designación de Ponsonby, había escrito que ". -un high aristocrat está poco calificado para tratar a los bajisimos demócratas con quienes debemos alternar aquí"

Ponsonby fue recibido por Rivadavia el primero de setiembre de 1826, con guardia de honor y salvas de artillería. Un mes después escribía sobre Rivadavia: "El Presidente me hizo recordar a Sancho Panza por su aspecto, pero no es ni la mitad de prudente que nuestro amigo Sancho. . . Como político carece de muchas de las cualidades necesarias". Estimó, sin embargo, que Rivadavia era "autor de muchas, beneficiosas y buenas leyes".

La Ley de Capital del Estado, proyecto presentado por el nuevo presidente y aprobado de inmediato, le hizo perder a Rivadavia también el apoyo de los porteños.

La ciudad de Buenos Aires quedaba bajo la autoridad nacional, hasta que ésta organizara una provincia. La provincia había desaparecido, contraviniéndose así lo expresado por la Ley fundamental de 1825.

Se terminó  por aprobar en diciembre de 1826 una Constitución que, si no fuera por su declarado republicanismo, coincide  en cuanto a su tendencia centralizadora con la de 1819 y, como aquella, provoca  la airada repulsa de los caudillos y los pueblos.

Así fracasó este nuevo intento de organizar al país. Rivadavia renunció en junio de 1827.

Pocos días después el poder nacional quedaba disuelto cobrando nuevos impulsos la guerra civil y las autonomías provinciales.

Rivadavia se retiró definitivamente de la vida pública. En 1829 parte hacia Francia, dejando a su familia en Buenos Aires. En Paría vuelve a su oficio de traductor. Pasan por sus manos "La Democracia en América" de Tocqueville; "Los viajes" y "El arte de criar gusanos de seda" de Dándolo. En 1834 decide regresar a Buenos Aires. Pero el gobierno de Viamonte le impide desembarcar. Su mujer y su hijo Martín, que lo esperaban en el puerto, suben al barco y se suman al exilio de Rivadavia. Los hijos mayores, Benito y Bernardino, tienen otros planes: se han sumado a la causa federal y están luchando para que Juan Manuel de Rosas asuma definitivamente el poder.


Los Rivadavia se instalan primero en Colonia y luego pasan a Brasil. Allí, tras un accidente doméstico, murió Juanita del Pino en diciembre de 1841. Martín volvió a Buenos Aires a unirse a sus hermanos y Rivadavia decidió a fines de 1842 partir hacia Cádiz, donde se instaló junto a dos sobrinas, en una modesta casa del barrio de la Constitución. Tenía sesenta y cinco años cuando hizo modificar su testamento al advertir que sus sobrinas le estaban robando la poca plata labrada que le quedaba. El 2 de septiembre de 1845, pocos días después de este episodio, murió pidiendo que su cuerpo "no volviera jamás a Buenos Aires". Sin embargo sus restos fueron repatriados en 1857 y desde 1932 descansan en el mausoleo levantado en su honor en Plaza Miserere.




PROYECTO DE DECLARACION

 

El Senado de la Nación

 DECLARA

 

De interés de esta Honorable Cámara la conmemoración de un nuevo aniversario de la sanción de la Ley 817, “Ley de Inmigración y Colonización”, promulgada el 19 de octubre de 1876, durante el mandato presidencial del Dr. Nicolás Avellaneda, cuyo objetivo fue favorecer la entrada de millones de extranjeros al territorio nacional.

Esta ley permitió al país sobrellevar una época económicamente difícil y aportó a la conformación de la masa demográfica y cultural que hoy nos identifica, dando lugar al denominado “crisol de razas”

 

Mario J. Colazo.

 

FUNDAMENTOS

 Señor Presidente:

 

El 6 de octubre de 1876 fue sancionada la Ley Nº 817 de “Inmigración y Colonización”, que significó un acontecimiento trascendental y de positiva proyección para el devenir demográfico del país. Por iniciativa del entonces Presidente de la Nación, Dr. Nicolás Avellaneda, este instrumento legal fue promulgado el 19 de octubre de 1876.

 Ante la necesidad de aprovechar las grandes extensiones de tierra de nuestro país, un amplio territorio sin explotar, este instrumento legal favoreció la entrada de millones de extranjeros al territorio nacional, dejando atrás la Argentina criolla y dando lugar al actual “crisol de razas”.

 La Ley de Inmigración fue producto de una época difícil y constituyó una política sensata que no anulaba las posibilidades de la inmigración espontánea, pero daba oportunidad de realizar una selección de los inmigrantes. Permitió, además, la distribución más equitativa de los territorios a colonizar.

 Definía los requisitos y procedimientos propios de aquella época, siendo uno de los aspectos más importantes que complementaba y asignaba extensividad a las disposiciones constitucionales, por cuanto tuvo la virtud de igualar los derechos civiles de los argentinos y de los extranjeros, proporcionado una trascendente unidad en los aspectos laborales, institucionales y de productividad, que se concretaron en el extraordinario desarrollo integral de todos los sectores del quehacer nacional.

 Inmediatamente después de su promulgación, la Ley fue ampliamente difundida en Europa, sobre todo en Italia y Austria, nombrándose agentes de inmigración en dichos países, para la organización de tareas relativas a difundir las ventajas que ofrecía el gobierno argentino a toda persona que quisiera radicarse en el territorio nacional.

 Desde el año 1857, y especialmente desde la promulgación de la ley el 19 de octubre de 1876, Argentina fue el segundo país de América que recibió más inmigrantes, solo superado por Estados Unidos, con la particularidad de que en Buenos Aires por cada argentino nativo había tres extranjeros. De los 5.481.27 inmigrantes llegados en ese período, 2.341.126 correspondió a italianos mientras que 1.602.752 fueron españoles.

 Hoy en día, casi todos los argentinos tienen ascendencia extranjera proveniente de este proceso inmigratorio o tienen inmigrantes en sus familias. Esta ley permite conocer un punto importante en la razón o el origen de su travesía como familia, desde Europa hasta nuestro paisaje nacional, en busca de un hogar y un mejor porvenir.

 Sr. Presidente, por todo lo expuesto, solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Declaración.

 Mario J. Colazo.





EJERCITACIÓN:

  1. ¿Cómo caracteriza José Luis Romero, en "Breve Historia de la Argentina", en La era criolla, al país que había nacido en 1810?. (El texto se encuentra en la parte de TEXTOS del blog).
  2. ¿En qué consistió el empréstito Baring Brothers y qué consecuencias trajo para el país?.
  3. ¿A que llamamos Ley Enfiteusis y cuales fueron las consecuencias para Argentina?.
  4. Cuales fueron los motivos que llevaron a realizar la llamada "Campaña del desierto". Cuales fueron sus consecuencias.
  5. Si es que existe una relación posible: Explique con sus palabras, que relación encuentra entre la llamada "Campaña del desierto" y la inmigración. 
               






Clase 06: viernes 03/05/2024

1er. PARCIAL DE HISTORIA ARGENTINA 2024